Anécdotas de secretarias. El jefe está reunido... ¿o no?

Entrevista de "La Contra" "Si las secretarias hiciesen huelga, el país se paralizaría" de La Vanguardia, 20/09/2008.
Rosa Gil, ex secretaria y periodista
Tengo 45 años. Nací en Calella y vivo en Barcelona. Fui secretaria de dirección y soy periodista. Estoy soltera, sin hijos. ¿Política? Soy independiente. ¿Creencias? Las respeto todas, no me cierro a entender las de todo el mundo. ¿Por qué aún caricaturizamos a las secretarias?
VÍCTOR-M. AMELA
Fue usted secretaria?
Sí. Fue mi primer trabajo, gracias al que en parte me pagué la carrera de Periodismo.
¿Secretaria dónde?
En un estudio de animación. Los dibujantes se anotaban sus cosas en manos y brazos, y yo iba persiguiéndolos para copiarlas y hacerles las agendas.
¿Era buena secretaria?
Un señor que llamaba a menudo me confesó un día por qué lo hacía: "¡Nadie me habla con su amabilidad!", me dijo. Aprendí mucho a tratar con todo tipo de personas.
¿Todo eso le fue útil como periodista?
Claro. Y de mis estudios de Secretariado de Dirección salí escribiendo a máquina a casi 300 pulsaciones por minuto, y sin mirar el teclado. Sí, esto me sirvió en la redacción de Sant Cugat para escribir en una Olivetti los textos que leía como presentadora de L´informatiu de TVE Catalunya. ¡Aún no había ordenadores ni teleprompter!
Ha escrito un libro sobre secretarias.
Quiero homenajearlas, pues son tan invisibles como imprescindibles. Lo dijo Antonio Garrigues Walker: si todas las secretarias hiciesen huelga, ¡el país se paralizaría!
¿Tanto como eso?
¡No lo dude! La secretaria, a la vez que elabora un informe, encarga un almuerzo para quince (y uno es vegetariano, otro celiaco y dos tienen colesterol), cierra un viaje transoceánico, revisa un power point,reclama al banco un error en la cuenta del jefe...
Me está estresando...
Y todo eso además de su trabajo corriente, ¡y con un promedio de una interrupción cada ocho minutos!, según las últimas estadísticas. Ellas son las que lo saben todo de una empresa y son su primer escaparate. Las empresas funcionan a través de ellas, son los canales por los que fluye todo, son las reguladoras de la información.
Ya, aquello de "el jefe está reunido".
Ellas son las que saben en qué momentos conviene decir eso con total naturalidad.
¿Siempre han sido mujeres?
No, primero fueron hombres: escribas, validos y luego secretarios. En el siglo XX irrumpieron las mujeres, que hoy son el 99% en esta función.
¿Qué virtudes debe reunir la buena secretaria?
Secretaria viene de secreto:ser discretas, saberlo todo como si fuese secreto de confesión. He hablado con muchas, ¡y ninguna me ha hablado mal de su jefe!
Tiene mérito.
En cambio, a ellas aún las caricaturizamos, o como solteronas feas bigotudas o como minifalderas casquivanas liadas con el jefe.
Algún caso habrá.
Como en cualquier otro ámbito. Lo común es que sean como una pareja de hecho de su jefe..., pero sin sexo. Su ángel de la guarda. "¡Mi secretaria hace milagros!", suelen admirarse sus jefes.
¿Hasta qué punto?
Por ejemplo, una secretaria española fue la primera que logró que sus jefes saliesen de Estados Unidos tras el 11-S en avión, con lo peliagudo que estaba el espacio aéreo.
Hablan mejor inglés que los jefes.
Suplen sus carencias. Hay contratos que se han firmado gracias a su mediación, lo que ha hecho crecer a esa compañía.
¿Extienden sus alas a lo personal?
Sí, muchas aconsejen a sus jefes acerca de su aspecto y su vida personal.
Y si el jefe tuviese una aventurilla, ¿le encubrirían ante la esposa?
Una me contaba cómo era interrogada por la esposa de su jefe, que sospechaba que cierta chica era amante de su marido.
¿Y lo era?
Sí, pero la secretaria le dijo a la esposa que esa chica tenía novio, y nada con su jefe.
¿La lealtad al jefe por delante de la solidaridad de sexo?
Así fue en este caso, pero otra me contó que sí le sopló la verdad a la esposa del jefe. El jefe la despidió, claro. Y la esposa, una vez divorciada, la fichó como su secretaria.
Parece el guión de una comedia.
Pues de astracanada se puede calificar el caso de esa secretaria de un estudio de doblaje ¡que por una emergencia tuvo que ponerse a doblar una película porno! La pobre, de tanto jadear, se hiperventiló y se desmayó.
Secretaria para todo, desde luego.
"Lo he hecho lo mejor que he podido, ¡como todo!", declaró a su asombrado jefe.
¿Qué otras anécdotas le han contado otras secretarias?
Una frena a su jefe cada vez que le ve entrar en el váter para orinar y tirar de la cadena mientras charla por el móvil. Otra, en una mudanza del despacho, tiró al váter el polvillo que contenía una cajita... y cuando el jefe preguntó por esa cajita, ella se enteró de que eran las cenizas del padre del jefe...
¿Y cómo resolvió el error?
Quemó unos papeles en la pila del lavabo... y restituyó cenizas. Su jefe las lució en el nuevo despacho, sin sospechar.
¿Hay secretarias que mandan más que algunos jefes?
La del bufete Cuatrecasas gestiona ¡a las 200 secretarias (con sus respectivos equipos)! de toda la firma de abogados...
Más personal que muchas empresas, sí.
La secretaria hasta ejerce de GPS: una me contó que su jefe llamó desde su coche en Londres, en busca de cierto restaurante, y ella le guió por teléfono desde el despacho, con un plano y la Guía Michelin:"Tuerza ahora a la izquierda...". El jefe cenó bien.
´Gent gran´
A la periodista Rosa Gil la recordamos de su trabajo en TVE Catalunya, en pantalla, en los informativos, y también en la presentación de programas, y, luego, como directora de programas: durante un tiempo, pues, ella tuvo también secretarias, de las que dice guardar excelente recuerdo. Gil ha valorado siempre ese trabajo, ya que fue el primero que desempeñó, antes de ser periodista, y por eso ahora cierra un círculo publicando Anécdotas de secretarias (Styria), libro en el que ha reunido las que le han relatado decenas de secretarias de toda España. Como periodista, Gil estrena hoy la temporada de su programa Gent gran,en RNE Ràdio 4, que se emite todos los sábados de cuatro a cinco de la tarde.
ISBN: 84-96626-87-4
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